Propósitos para el año nuevo
El blog está a punto de cumplir 4 años y veo que este último año, 2014, lo he tenido especialmente abandonado. He dejado muchos artículos a medio escribir, decenas de borradores con ideas, y series de artículos sin acabar.
Aprovechando el periodo navideño, estoy haciendo la necesaria revisión del año, analizando la evolución de los acontecimientos de mi vida, asimilando, aprendiendo, y decidiendo cuáles quiero que sean las “vigas maestras” para el 2015.
Recuperar el blog es una de ellas, por un motivo muy importante: es donde empezó Amalur Zen. Recuperar el blog es también retomar la misión inicial de Amalur Zen de divulgación: transmitir la cultura de la salud, de llevar una vida más plena y saludable, de vivir con consciencia.
Ideas para retomar (o comenzar) un hábito
Cuando vas dejando abandonado cualquier buen hábito (como hacer ejercicio, o comer de forma saludable), cuanto más tiempo dejas pasar, más cuesta retomarlo. Por inercia, o por creer que no vas a poder hacerlo de nuevo, o porque piensas que, después de tanto tiempo, las expectativas del resultado son mayores. Todo son excusas.
En su web, Leo Babauta tiene muchos y buenos artículos sobre cómo solucionar este problema, y hoy estoy aplicando varios de sus consejos:
- La ley de los 5 minutos: para vencer los “es que no tengo tiempo”, “¡uf! ¡qué pereza…!” y similares, ponte con esa tarea solo 5 minutos. Ponte incluso un cronómetro, si quieres. Si consigues ponerte esos 5 minutos, verás que después es muchísimo más fácil continuar, y que sin darte cuenta, la habrás terminado (y si a los 5 minutos paras, al menos habrás avanzado 5 minutos en esa tarea ;)).
Eso es lo que he hecho hoy: no sabía qué iba a escribir, si iba a empezar un artículo nuevo, si iba a continuar con alguno de los que tengo a medias… pero después de 5 minutos escribiendo incoherencias delante del ordenador, saltando de documento a documento, vino la inspiración y ahora no quiero parar :D.
- Comprométete compartiendo tus intenciones: cuando deseas hacer un cambio en tu vida, o realizar un reto, puedes hacerlo en secreto o compartirlo (con tu familia, tus amigos, o como está de moda hoy en día, en tus redes sociales). En el primer caso, solo eres responsable ante ti mismo/a. Puede que tengas una fuerza de voluntad de hierro, pero si es algo que has estado posponiendo durante tiempo, lo más seguro es que seas demasiado/a listo/a para tu propio bien, y tu cerebro te haya convencido con un montón de excusas súper racionales para no hacerlo. Y lo volverá a hacer. En el segundo caso, la presión y el compromiso crecen: aquellos con quien lo has compartido, te preguntarán cómo vas, y estarás mucho más motivado/a a llevarlo a cabo.
Con este artículo, estoy comprometiéndome con todos los lectores y seguidores de Amalur Zen, compartiendo mi propósito de publicar contenido con mayor frecuencia.
- Empieza poco a poco, y planifícate: ¡no intentes lanzarte a correr una maratón! Empieza con cosas más pequeñas, más fáciles, alcanzables. Sé comprensivo/a contigo mismo/a, y plantéate objetivos a corto plazo, que puedas conseguir.
En mi caso, esto implica decidir sobre qué temas quiero escribir, recopilar información, hacer limpieza de la carpeta de artículos “in progress”, y lo más importante: publicar un artículo, el que sea, por ejemplo, este. Y después otro. Y otro, y otro, y otro…. 🙂
- Analiza los por qués y qué has aprendido: ¿por qué empecé a escribir? ¿por qué dejé de escribir? Y con todo ello: ¿qué puedo hacer de forma diferente para hacerlo mejor esta vez?
Poniendo las ideas en práctica
¿Por qué empecé a escribir?
Empecé a escribir el blog porque siempre me ha gustado escribir. Desde bien pequeñita. Sobre cualquier tema y casi cualquier género. Me gustan las palabras, me gusta su sonido, saborearlas, jugar con ellas.
Empecé a escribir porque quería compartir todo lo que estaba aprendiendo sobre shiatsu y medicina tradicional china, sobre todo este mundo que me parecía tan extraordinario, y aún hoy no deja de maravillarme. Y quería compartir todo esto en Internet porque me parece la herramienta más fascinante de todas las creadas por el hombre, y poder llegar así a todos los rincones del mundo.
Empecé a escribir, como muchas otras personas, porque es un bálsamo para mi mente y mi espíritu, porque es curativo, porque me amuebla la cabeza y me ordena las ideas. Porque me ayuda a repasar materias, a estudiar nuevos temas, e incluso a tomar decisiones.
Conceptos como el márqueting de contenidos, el SEO, etc., son totalmente secundarios. Sé lo que son, que son “útiles” y “necesarios”; sé qué los debería tener en cuenta, sé qué y cómo debería escribir…. pero son conceptos que “me molestan”. Me bloquean y no me dejan escribir.
¿por qué dejé de escribir?
O “qué me ha pasado en 2014”
- El último artículo del blog es de finales de marzo. Desde entonces y durante algunos meses, hubo varios temas personales que me obligaron a centrar toda mi atención y mi tiempo únicamente en lo más imprescindible. No sólo el blog quedó relegado a un segundo plano, muchas otras cosas también.
- Pasada la tormenta, durante el verano me apliqué un poco de mi propia medicina, y me dediqué a cuidarme y prestarme atención. Necesitaba un tiempo de introspección.
- Durante este año además, hemos crecido mucho en Amalur Zen, como podrás ver en nuestra sección de Tratamientos y de Actividades. Esto, que es una gran noticia y algo por lo que estoy feliz y agradecida, significó también tener que dedicar mucho tiempo a tareas de gestión, administración y logística, y un periodo de adaptación a nuevas responsabilidades.
- Desde finales de octubre estoy haciendo una nueva formación de shiatsu para el embarazo con Suzanne Yates a la que he decidido dedicar todo el tiempo posible, y que estoy disfrutando muchísimo.
- He aumentado mi colaboración con empresas, llevando el shiatsu a más oficinas, labor que es a partes iguales agotadora y gratificante.
Pero a parte de falta de tiempo, también ha habido una buena dosis de inseguridad, falta de motivación, falta de inspiración, expectativas…
Entonces: ¿qué puedo mejorar? ¿qué puedo hacer?
- reservar en mi agenda “espacios sagrados” para escribir, y respetarlos;
- tener artículos guardados “en la reserva”, para las épocas en las que por trabajo, viajes o temas personales no pueda dedicarle tiempo al blog;
- no obsesionarme con la calidad. La mayoría del contenido en Internet es terrorífico, y está bien querer ofrecer contenido de calidad, pero hasta los mejores tienen artículos “flojos” de vez en cuando. Siguen siendo infinitamente mejores que la mayoría, y lo que importa es el mensaje ¿no?;
- escribir artículos cortos (ehem, no como este :D);
- pensar en más cosas que quiera compartir a través del blog: no siempre es necesario compartir artículos de contenido original… ¡hay mucho más para compartir!.
¿Y ahora? ¡¡Manos a la obra!!
Espero que esta reflexión pueda ayudar a alguien más, que te inspire o haga reflexionar. ¿Cuáles son tus “buenos propósitos” para 2015? ¿qué cosas de tu vida te gustaría cambiar? ¿qué hábitos te gustaría iniciar?
¡Hasta el año que viene!
Sandra Jiménez
Terapeuta de Shiatsu Zen
Soy una ingeniera informática que un día decidió dejar su trabajo para dedicarse de pleno a su pasión: el Shiatsu, la Medicina Tradicional China, la salud y el bienestar. Desde entonces he trabajado y colaborado con varios centros de terapias naturales como terapeuta de Shiatsu y masajista.
En 2011 lancé AMALUR ZEN como un blog sobre Shiatsu y salud y en 2013 abrí el centro de terapias AMALUR ZEN ~ Bienestar Integral, donde comparto el espacio con un equipo multidisciplinar de terapeutas. ¿Quieres conocer mi historia?