Sobre la salud
«I believe that it is not our right but our duty to be healthy.» Shizuto Masunaga
(«Creo que estar sanos no es nuestro derecho, sino nuestro deber«)
Quiero abrir este blog con esta frase del maestro Masunaga por muchos motivos. Al leerla por primera vez en el prólogo del libro «Zen Shiatsu», se me quedó grabada en la retina, la mente y el corazón. Cada vez que la vuelvo a leer o pienso en ella me hace reflexionar de nuevo, y es por ello que quiero invitar a hacer la misma reflexión. ¿Qué es la salud? ¿Qué papel jugamos en el mantenimiento de nuestra propia salud? (e incluso iría más allá, preguntándome ¿cuántas cosas que dañan mi salud hago de forma consciente?).
La frase es también un buen reflejo de las diferencias entre la medicina occidental y la medicina oriental. Según la tradición médica oriental es el enfermo el que se cura a sí mismo, mediante la capacidad de autocuración innata de todo organismo vivo. La medicina oriental hace a la propia persona responsable de su salud, y el sanador, o médico, sólamente orienta, ofreciendo una ayuda para potenciar esa capacidad regenerativa.
En occidente en los últimos siglos la medicina ha generado cierta actitud «paternalista»: el paciente se cura de una enfermedad con los remedios que le da el médico y las herramientas de la medicina. Esta tendencia a aplicar las formas de autoridad y protección de un cabeza de familia han generado, en mi opinión, que la propia palabra «paciente» haya llegado a convertirse en un sinónimo (erróneo) de pasividad. Aunque etimológicamente su significado sea padecer, también indica «que tiene paciencia», o el «sujeto que recibe la acción» en el contexto gramatical, sugiriendo que el enfermo (paciente) ha de comportarse como un ente pasivo.
La ciencia, fundamento impresdindible de los avances médicos occidentales, ve la vida diseccionada en partes separadas, inconexas, en un entorno fijo, estable y controlado, que puede medirse objetivamente. La especialización se lleva hasta el nivel celular. Existen cirujanos, oncólogos, cardiólogos…que usan analíticas, microscópios, escáneres y todo tipo de aparatos de medición, con el objetivo de aislar e identificar la enfermedad para extraerla.
En el modelo oriental, la vida consiste en las relaciones dinámicas y constantemente cambiantes de un sistema funcional con otro, siempre dentro del contexto global y completo. Ningún aspecto de la persona funciona como una entidad independiente. La medicina oriental no separa el problema de la persona, no trata la enfermedad, sino a la persona dentro de su contexto cambiante.
Por supuesto, los dos enfoques tienen sus ventajas y sus limitaciones. Los mejores resultados para lograr mantener una salud óptima se consiguen uniendo ambos modelos y dando a la persona la responsabilidad de su propia salud.
Sandra Jiménez
Terapeuta de Shiatsu Zen
Soy una ingeniera informática que un día decidió dejar su trabajo para dedicarse de pleno a su pasión: el Shiatsu, la Medicina Tradicional China, la salud y el bienestar. Desde entonces he trabajado y colaborado con varios centros de terapias naturales como terapeuta de Shiatsu y masajista.
En 2011 lancé AMALUR ZEN como un blog sobre Shiatsu y salud y en 2013 abrí el centro de terapias AMALUR ZEN ~ Bienestar Integral, donde comparto el espacio con un equipo multidisciplinar de terapeutas. ¿Quieres conocer mi historia?