Presentación del libro “Shiatsu ilustrado – Una ventana al arte del contacto”
Ayer estuve en la presentación en Barcelona del maravilloso libro de Cristina Poll y David Ventura, “Shiatsu ilustrado – Una ventana al arte del contacto”. Fue un momento muy emotivo y emocionante para los autores, y creo que también para todos los que estábamos allí y, como yo, les conocemos y sabemos cuánto amor, dedicación y esfuerzo han dedicado a esta obra de arte (sí, he dicho bien, obra de arte).
A principios de verano, cuando la criatura vio la luz, tuve el privilegio de ser una de las primeras personas en comprarlo y en enamorarme de él. Cristina me pidió ayuda para escribir una pequeña reseña del libro, y lo que escribí me salió del alma. Volviéndolo a leer y después de la presentación de ayer, cada palabra tiene aún más sentido.
El libro
“Shiatsu ilustrado” nace de la necesidad de transmitir el Shiatsu de una manera didáctica, pero a la vez sentida, “más desde el hacer y el sentir que desde el pensar”. Comenzó como “unos dibujitos en los márgenes de las libretas de apuntes”, mientras Cristina era estudiante de Shiatsu en la escuela de David. Poco a poco surgió la idea, de forma un poco inocente: “¿y si hacemos un libro…?”. David apoyó el proyecto y se lanzaron a la aventura. Pronto se darían cuenta de que aquello era algo más grande, un desafío, que ha costado años de esfuerzo.
El resultado final transmite todo eso y mucho más: amor por las cosas bien hechas, amor por el shiatsu, por el contacto, y por la vida.
El libro es una guía de Shiatsu donde, además de dar una visión amplia de qué es el Shiatsu y para qué sirve, se explica paso a paso, con infinita claridad, las técnicas básicas de tratamiento en Shiatsu, divididas por posturas y por zonas del cuerpo.
Los textos introductorios de cada sección son una invitación a relfexionar, a tomar consciencia del cuerpo, a tocar e intercambiar. Cada técnica está dibujada con elegancia, y casi no son necesarias las palabras. Cuando sí lo son, se incluye alguna pequeña aclaración o nota técnica. Gracias al cuidado con el que está maquetado el libro, las técnicas fluyen en las páginas, y casi es como estar viendo una sesión de shiatsu en vivo, más que leyendo un libro. Es un libro que, por su claridad y pragmatismo, servirá de gran ayuda a todos los estudiantes de Shiatsu, independientemente de su escuela. Por todo lo demás, es un libro que enamorará a cualquier practicante de Shiatsu.
La presentación
La presentación tuvo lugar en la Fundación Jordi Sierra i Fabra un espacio dedicado a promover la literatura, y especialmente, la lectura entre los más jóvenes. Comenzó un poquito tarde, ya se sabe, no solemos ser muy puntuales. Había nervios, pero los autores estaban “entre amigos”.
Comenzamos: ¿qué mejor manera de presentar un libro de Shiatsu, que haciendo Shiatsu?. Para mi, fue la manera perfecta.
Ante una sala llena, Cristina y David se turnaron haciendo mini-sesiones de Shiatsu a voluntarios del público por una parte, y hablando del libro y respondiendo a las preguntas de los asistentes por otra. Aunque rápidamente se vio que a David se le daban mejor las palabras, y Cristina se encontraba mucho más en su salsa haciendo Shiatsu.
Ambos transmitieron muy bien qué es el Shiatsu, en su sentido más amplio y profundo, en lo más práctico y en lo más sutil. Para los que el Shiatsu era algo nuevo, aprendieron de mano de dos expertos que el arte del contacto tiene mucho más que ver con la presencia, la consciencia y el buen hacer que con la magia; que la energía lo es todo, pero que es algo que se ha mitificado y que es mucho más cotidiano de lo que nos han hecho creer. Para los que nos dedicamos al Shiatsu, fue una lección de humildad y buena dosis de agradecimiento, por esta oportunidad que tenemos cada día de compartir el Shiatsu con otras personas.
El Shiatsu
Durante la presentación del libro, más que del libro en sí, se habló sobre el Shiatsu. No conocía a David Ventura personalmente, pero sí había oído hablar mucho de él, y había conocido a bastantes de sus alumnos/as.
Me gustó muchísimo su forma de explicar el Shiatsu, de comunicar y de transmitir, sin “hablar en chino”. Por momentos tuve la sensación de que estaba hablando de algo totalmente distinto a lo que yo había estudiado (en parte cierto, pues su escuela es la del “Shiatsu y Movimiento”, que aunque comparte orígenes con el Shiatsu Zen, ha evolucionado de forma distinta), pero que al mismo tiempo resonaba totalmente con lo que yo sentía y creía que el Shiatsu era. No una “técnica manual de digitopresión que trabaja con los meridianos y puntos para re-establecer el correcto flujo de energía en el cuerpo”. Si no una “forma de enseñar a ganar consciencia, de dar espacio y herramientas al receptor para que pueda evolucionar, sin forzar, sin intentar cambiar nada, dando apoyo y un marco de confianza”.
No sé si las preguntas de los asistentes fueron respondidas o si se quedaron con alguna duda. Para mi fue muy enriquecedor, y me fui como si hubiera salido de una clase magistral, con la sensación de haber aprendido un poco más sobre el Shiatsu y de tener nuevas herramientas para transmitir el Shiatsu a cualquiera que me pregunte.
“Trabajamos mucho el cuerpo, pero lo vivimos poco”.
Finalmente, no puedo decir má que gracias David y gracias Cristina, por este libro y por la presentación de ayer.
Sandra Jiménez
Terapeuta de Shiatsu Zen
Soy una ingeniera informática que un día decidió dejar su trabajo para dedicarse de pleno a su pasión: el Shiatsu, la Medicina Tradicional China, la salud y el bienestar. Desde entonces he trabajado y colaborado con varios centros de terapias naturales como terapeuta de Shiatsu y masajista.
En 2011 lancé AMALUR ZEN como un blog sobre Shiatsu y salud y en 2013 abrí el centro de terapias AMALUR ZEN ~ Bienestar Integral, donde comparto el espacio con un equipo multidisciplinar de terapeutas. ¿Quieres conocer mi historia?
Realmente fue así!
gracias por compartir!